Estaba dudando entre arropar esta lámpara Tiffanys auténtica estilo botica de algunos elementos tradicionales o acompañarla por elementos algo más típicos de una botica. Me he decantado por lo primero y creo que ya sabéis el motivo, sobre todo los que habéis leído entradas anteriores: me encanta mezclar; la homogeneidad conseguida desde la heterogeneidad, y es que en el título no había espacio para toda la descripción.
Te diré que las Tiffanys se clasifican en auténticas y no auténticas o falsas.
Las primeras están realizadas en cristal de Tiffanys que da nombre a la lámpara. Se cortan pequeños trozos de cristal que se unen con cobre, estaño y plomo. Tienen gran valor ya que son realizadas a mano y su fragilidad va acorde con su belleza.
Las segundas suelen ser piezas de plástico que se pintan y simulan ser Tiffanys auténticas. No tienen más valor que el que cada persona pueda darles.
Las fuentes de antaño me gustan mucho, sobre todo las lozas y porcelana de fábricas que cerraron sus puertas. Esas fábricas no dejaron la calidad a un lado para aliarse con los costes y pagaron un alto precio, pero por eso su valor crece cada día pese al paso del tiempo. En cambio una pieza similar de hoy en día puede tener cada día que pasa menos valor debido al uso. Una preciosidad en tonos turquesa y oro auténtico a raudales con filigranas por toda la fuente.
Puedes ver la base de la fuente anterior con el código de la Fábrica de San Claudio en Oviedo y un código N2 craquelado.
Puedes apreciar más de cerca el taladrador de hojas. Se trata de un antiguo modelo de El Casco, realizado en Eibar y funcionando como el primer día. Es bastante pesado para el volumen que tiene y eso puede ser a que está integramente realizado en metal; no se aprecia ni un minúsculo trozo de goma o plástico.
La bufanda azul bitonal ha sido realizada en casa y junto a los ovillos y la madera nos contrarresta la frialdad del resto de metal y cristal. La pieza roja proviniento de FIAT sujeta un extrañísimo objeto francés.
Después de darle muchas vueltas el objeto frances. Cri - cri de Le Puy es un encendedor eléctrico para las antiguas cocinas de gas. Parece que fue ayer cuando las vitrocerámicas y plazas de inducción asaltaron las encimeras.También figura en la etiqueta la inscripción que suponemos sea la marca y es R.V.
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