Es una de mis dos FASE favoritas. Y no lo es por su estado, tiene óxido a raudales en el 100% de su superficie, no tiene cristal ni rótula, la madera con marcas de cigarrillos apagados; pero nadie le puede decir que no ha vivido lo suyo. Proviene del taller de una fábrica y me encanta saber que ha vivido en un genuino taller dentro de una fábrica. No he visto otra FASE en un estado tan deplorable pero es la lámpara que me ilumina cuando estudio o ahora mismo mientras escribo estas líneas.
La madera que ves es de castaño, me gusta más que la de roble. Si lijas madera de roble debes protegerte de aspirar su polvo, es potencialmente cancerígeno. Las pinturas y barnices acrílicos puede que no den el acabado soñado pero son más respetuosas con el medio ambiente, con los que te rodean y también contigo.
Ya sabes que los ovillos de hilo industrial tienen un tamaño mayor que el que se suele ver en las máquinas de coser que hay en las casas. Siempre aportan un toque de calidez, un toque incluso orgánico en contraposición de los metales y cristal.
Dos cubos de hierro macizos con sendos taladros pasantes. Los suelo utilizar para poner el boligrafo en posición vertical y tenerlo siempre visible y a mano. Se les puede quitar el óxido y darles una capa de barniz para detener la oxidación pero mientras no manchen yo les dejo el óxido. Llegará el tiempo que el óxido se cotize por la escasez de piezas auténticas de hierro cuando todo sean nuevas aleaciones menos duraderas y duras. Tiempo al tiempo...
Puedes ver la FASE 520 sobre la mesita. Qué dificil es valorar los sentimientos depositados en un objeto material, pero que bueno es tener esos pequeños objetos a los que le damos un valor personal que nadie puede. Todo lo que ves es material siempre reciclado que disfruta o sufre de una nueva vida.
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